martes, 29 de abril de 2008

Deambulando

A veces yo me agarro a tu nombre y lo estrío de garras como vieja caníbal aguardando el inicio de la fiesta de tu carne.
No equivoquen la sangre con la negra cocción de tus vísceras que nada falta de humano en este desmembrarte.
Aquí, no caben los actos anticuadamente eróticos
hay que darse al corte perfecto de los surcos musculares
hay que saber darse a la muerte sin silencio y con detalles
nada de vueltas al origen ni purificación de palabras
ni mentiras de encontrarse con el Verbo
que el lenguaje se inventó para descuartizarte
para no ahuyentar fantasmas
para no dejar huellas
para borrarse
sí, sí,
que yo te voy nombrando
letra a letra
en la imagen mental de mi discurso
que vas apareciendo en graffiti
como huellita labrada en el papelito
como lectura braille
como découpage
concretito
de cuerpo excrementado
y mancillado por el parto especular
y ensangrentado de yo haberte obligado a rasgar las entrañas...

1 comentario:

Xavier Valcárcel dijo...

estás escribiendo cabrónnnnn
nena
en serio.

un beso
gracias por lo de anoche.

wuuuuuuuuiii!!!